Yes we can

De todos es sabido que la historia la escriben (por lo menos hasta la llegada de las democracias) los vencedores y que generalmente ellos, los que tenían el poder, a parte de ser hombres, heterosexuales y blancos (por supuesto) obtenían ese poder por cuestiones tales como su “sangre azul”, participaciones en cruentas batallas y ese tipo de cosas de hombres blancos y heterosexuales muy machotes: lo que pone a esos conservadores que prescindieron para conseguir la victoria en la batalla de cualquier ética o moral, de los mejores valores de los seres humanos.

¡Yes we can! es algo más que ¡si, podemos! Para mi sustituye a un grito de guerra, es un grito de revolución cívica y pacífica porque gracias a la democracia, a la educación universal y a la búsqueda incansable de la igualdad todos y todas podemos.

Una persona, un voto; eso ha demostrado la victoria de Obama y eso han demostrado las conquistas democráticas de los que a priori eran los/as perderdores/as de las historia y que han llegado a las mas altas metas sociales, deportivas, culturales o laborales. Y eso en el fondo molesta mucho a los que tenían garantizado su futuro por derechos adquiridos injustamente y sin merito, lo que les molesta es que podemos elegir y decidir y ahora tienen que competir con el talento, la creatividad y la ilusión en construir un mundo mejor. Y eso es cambiar los “designios divinos”…